Miden entre 70 y 90 centímetros y pesan hasta 80 kilogramos, siendo la especie más grande de la familia. Lucen un pelaje corto e hirsuto, de coloración amarillenta o rojiza con manchas ovaladas e irregulares de color marrón oscuro. Tienen una crin corta y enhiesta, y en la cola, que es bastante corta, muestran un pincel de pelos largos y negros. Las patas antes anteriores son más largas que las posteriores. Las hembras, que son ligeramente más grandes que los machos, poseen un pseudopene que tiene un papel importante en las relaciones sociales.

Las mandíbulas de las hienas son poderosísimas, y podrían partir de un mordisco el fémur de un caballo. Viven en grupos, si bien pasan las horas del día en madrigueras particulares, para salir de caza en el crepúsculo y por la noche tras reunirse con su reclamo que parece una grotesca risotada.

Sus presas favoritas son las cebras y los antílopes, a los que dan caza en grupo. También comen carroñas, pero no tanta como en alguna época se creyó.

La gestación dura unos 110 días y suelen parir dos crías por camada, que nacen con los ojos abiertos.

La hiena manchada se encuentra dsitribuida por casi toda África, con excepción del desierto del Sahara y la cuenca del río Congo, y también en Turquía y Oriente Medio.

Rev: diciembre-11